En la última “fiesta virtual” con motivo del cumpleaños de mi hija Gaby alguien preguntó si yo conocía de algunos Postres de la Región Andina y si el pastel que había hecho era típico de algún país de la parte sur del continente.
De hecho es que dentro de los ‘invitados’ habían vari@s amig@s de esa región donde la mayoría, claro, eran del Ecuador más unos pocos de Brasil, Perú, Colombia y Argentina.
Además, la interesante conversación se fue acorralando al tema de la comida en especial de los postres, endulzando el agradable ambiente en el que todos pusimos nuestro granito ‘de azucar’.
Los postres andinos
Culturalmente la región andina está comprendida por Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú y es la zona productora de la papa y el maíz, base alimentaria de la humanidad.
Como resultado, no es difícil que podamos encontrar postres típicos en base a estos productos ancestrales ricos en antioxidantes, fibra, minerales y vitaminas necesarias para el saludable desarrollo de la población.
Igualmente, muy importante son los postres provenientes de estos tesoros que la madre tierra nos ofrece, por ejemplo la torta y los suspiros de papa; así como, tarta o tortilla de dulce, pan dulce y caca de perro en base al maíz, o la colada morada, solo para citar unos pocos.
De la misma manera tenemos platos bien conocidos que se podrían considerar postres por su exquisitez como las palomitas de maíz (pipoca, crispetas, canguil, canchita) o popcorn traducido al inglés.
Igualmente, yo puedo encontrar al famoso puré de papa que cuenta con una variedad muy amplia de diferentes versiones, colores y sabores, unas mejor que otras además de populares.
Suspiros de papa
Uno de los postres de la zona andina que no es muy conocido es este delicioso suspiro preparado nada más y nada menos que con tubérculos amarillentos de la variedad conocida en la región como uvilla.
Es un postre muy fácil de preparar pero sobre todo la mayoría de sus ingredientes son parte indispensable en una alacena de un cocinero aficionado o profesional, como todos los de esta lista:
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Papa uvilla 1 libra
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Leche evaporada ½ taza
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Agua ¼ de taza
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Azucar 5 cucharadas
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Yema de huevo ½ unidad
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Polvo de hornear 2 cucharaditas
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Nuez moscada ½ cucharadita (entrega gratis en dos horas aquí)
Pasos para la preparación
Estos suspiros se preparan sin ningún misterio ni complicación a tal punto que hasta yo lo puedo hacer y que conste que tan solo soy un principiante 🙂
Con la asistencia de mi nieta Jamila vamos a seguir los consejos heredados de mi abuelita Carmela
que siempre lavaba las patatas por lo menos una hora antes de la faena para luego proceder a:
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Cocinar las papas peladas para hacer un puré
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Mezclar en el puré todos los ingredientes
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Formar los suspiros al gusto y colocarlos sobre papel de hornear en una lata
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Precalentar el horno a 250°C (480°F)
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De preferencia bañar con huevo antes de ingresarlo al horno
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Llevar los suspiros al horno a 220°C (430°F) por un poco más de 30 minutos
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Dejar que se pierda el calor intenso antes de servir
Además de deliciosos, se ven espectaculares si les baño con miel de panela y les adorno con unos trozos de queso al gusto como se suele hacer en algunos sitios de la región, como para chuparse los dedos mmm!.
Suministro adecuado
Igualmente importante es contar con la herramienta adecuada para darle la forma de un suspiro regular o de lo contrario tengo que recurrir a mi habilidad para ir construyendo de uno en uno de forma manual.
En consecuencia, me podría tomar un tiempo extra antes de poder ofrecer estos deliciosos suspiros a mis exigentes comensales regulares, mis nietas 🙂
La ventaja es de que cuento con una manga pastelera y un juego de puntas de decoración de pasteles con una en especial, adecuada para este caso, que me va a ahorrar un pocoton de tiempo antes que mis invitadas me regañen.
Estas puntas forman parte de un juego de suministros para decoración de pasteles que los adquirí en el momento que quise ser “pastelero” por afición.
Desventajas de hacerlo manualmente
Primero que nada no todos contamos con la misma habilidad para ejercer cualquier movimiento, ejercicio o trabajo usando las manos.
Segundo, unos somos más hábiles con la mano izquierda y otros con la mano derecha. Como resultado tenemos que unos podemos usar más tiempo que otros para obtener un buen resultado al final de una tarea.
En consecuencia, cualquiera que sea el nivel de mi habilidad con las manos, es preferible poder utilizar un instrumento que me ayude a conseguir el resultado deseado.
Igualmente importante a veces es el tiempo que me toma para lograr, en este caso, unos suspiros agradablemente vistosos y no solamente muy sabrosos como los de esta receta heredada por generaciones desde tiempos lejanos.
Punta de glaseado para decoración
Cuando de decoración de pasteles se trata yo cuento con pocas puntas auxiliares pero creo que son las suficientes para lograr cualquier figura que se me ocurre, como la que usé, para formar los suspiros de papas.
Son muy económicas, apenas page alrededor de $12 un año atrás por un juego de pocas puntas con las que me defiendo fácilmente y he logrado pasteles semejantes a los hechos por chefs profesionales.
Hay una variedad muy amplia al momento de escoger.
A continuación les presento las que yo adquirí a través de Amazon y se llaman BeBeFun 304 Stainless Steel Extra-Large, es un juego de 6 puntas que espero les sea tan útil como lo son para mi.
Recuerda también que puedes disponer de consejos útiles, además de la receta completa de los suspiros de papas si te sumas a la lista de correos electrónicos de tu página conlupaytenedor.org
Cualquier comentario constructivo es bienvenido ya que estoy seguro que ayudara a los lectores a ilustrarse completamente en relación a los postres de esta maravillosa región del Sur de América rica en gastromia, además poseedora de hermosos paisajes.
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